Antonino Espinosa Laña se quedó corto
Desaparecido sociólogo siempre temió expansionismo de Brasil sobre Perú. Quien además fuera ideólogo del PPC, jamás imaginó que este proceso se facilitaría a través de la coima y la prebenda.
Desde su cátedra en la Universidad de Lima brindó información interesante sobre las ambiciones geopolíticas del enorme país vecino. Murió en 2013 después de una fructífera carrera profesional, docente y política.
En 1979, durante sus clases de sociología el desaparecido Antonino Espinosa Laña presentaba impactante material visual de cómo Brasil estaba programando su expansionismo hacia América del Sur.
El entonces catedrático de la Universidad de Lima mostraba los avances de la supercarretera en forma de anillo que conectaría con Venezuela, en el norte; con Perú hacia el oeste; y con Bolivia al sur.
Palabras más, palabras menos, Espinosa Laña predecía que por el año 2030 el portugués se hablaría con fluidez en gran parte del territorio peruano, sobre todo en las zonas de mayor desarrollo urbano, como la franja costera.

antonino espinosa en una conferencia en la universidad de lima.
En ese lejano 1979, Antonino daba como ejemplo la presencia de esa lengua en la zona Puerto Maldonado bajo la zona de influencia de la ciudad brasileña de Río Branco. Reforzaba su perspectiva con la antigua y sostenida influencia brasileña en Loreto y una localidad principal del oriente peruano, como Pucallpa.
Y es que, según su análisis, Brasil apuntaba a tener salida independiente por el Océano Pacífico y así dominar el comercio con Europa y África por el Atlántico y con Asia por este lado del subcontinente.
EL TIEMPO DECANTA TODO
Los sueños imperiales que Antonio Espinosa le atribuía a Brasil parecen ahora dormir un sueño indeterminado. El terremoto político provocado por el Caso Lava Jato los tiene muy atareados como para pensar en expansionismos y conquistas.
Y ese emblemático caso de corrupción, de compra y venta de voluntades al por mayor, ha servido también para precisar que si Brasil apuntaba hacia una salida limpia hacia el Océano Pacífico nuestra clase política y nuestro sector empresarial se la habría entregado a cambio de unas cuantas monedas lanzadas en algún paraíso fiscal.
Antonino Espinosa, ideólogo del Partido Popular Cristiano, murió en 2013. No le alcanzó el tiempo para ser testigo de esta relación depravada de la política con el poder, de esa sumisión miserable ante billetes estadunidenses y patrones foráneos.
Los temores de Espinosa Laña eran fundados. Estábamos por caer redonditos ante el poder político y empresarial de Brasil, pero no por un plan geopolítico de alta complejidad sino por billetes puestos en la cuenta de presidentes en ejercicio o de sus testaferros.

las dos caras de odebrecht.
CASOS DE LA VIDA REAL
Ollanta Humala, comandante en retiro del Ejército Peruano, líder de un partido denominado Nacionalista, está acusado de recibir dinero de dos fuentes tóxicas: la Venezuela chavista y las corruptas y corruptoras constructoras brasileñas (Odebrecht, OAS, etc.).
Alejandro Toledo, el excholo sano y sagrado, figura con orden de captura internacional por el supuesto de haber recibido una coima por la Carretera Interoceánica, aquella que unió precisamente Brasil con Perú por Madre de Dios y Río Branco.
La exalcadesa de Lima, la izquierdista Susana Villarán, ha sido señalada por corruptos ejecutivos brasileños como la receptora de entre tres y cuatro millones de dólares para sostener una campaña en contra de la revocatoria que pretendía sacarla del cargo en su primer año de mandato.
Un exviceministro, un exvicepresidente de Petroperú y exfuncionarios del ministerio de Transportes y Comunicaciones del segundo gobierno de Alan García también están comprometidos en tramas de corrupción, sobornos y cuentas en el exterior.
Keiko Fujimori lideresa de Fuerza Popular ha sido sindicada, aparentemente, por Marcelo Odebrecht, accionista principal de la empresa del mismo nombre, como receptora de apoyo económico para la campaña electoral de 2011.
Incluso el propio Pedro Pablo Kuczynski, presidente de la República, está bajo sospecha del mismo trato pecuniario. Las investigaciones y las declaraciones de Jorge Barata, el exfuncionario de Odebrecht que se encargaba de las coimas, pronto darán más luces en estos dos últimos casos y quizá sobre el expresidente Alan García Pérez con quien sostuvo una prolongada relación de amistad.

jorge barata le saldrá muy caro a más de un exmandatario peruano. el brasileño estaba encargado de direccionar las coimas de la constructora odebrecht en el país.
LA HISTORIA NO SE DETIENE
Los responsables de la geopolítica en cada país de América del Sur deben estar replanteando sus esquemas de trabajo para un futuro no muy lejano. Ya saben que a los políticos y empresarios de este país les encanta el billete y la componenda. Son capaces de vender soberanía al mejor postor y recursos naturales a los depredadores. En fin, hampones elegidos por el voto popular y capaces de subastar hasta el alma de sus compatriotas.
Brasil, durante el largo gobierno de Lula, optó por integrarse al subcontinente a través del español (hay una promoción para aprenderlo en escuelas, institutos y universidades) y no seguir de espaldas ante vecinos que valoran poco el portugués.
Salvo algunas palabras que quedarán en la memoria colectiva, como Lava Jato (Auto Lavado), la lengua que dominan los brasileños no tiene un futuro auspicioso por estos territorios.
Antonino Espinosa Laña estudió con ahínco las estructuras del poder político y militar de Brasil. Le faltó mayor precisión al aproximarse al conocimiento de los canallas y maleantes de nuestra fauna política.
*Periodista y editor del blog: www.unavozunavez.blogspot.com